jueves, 4 de septiembre de 2008

SARI. Don Sergio Jesus Vasallo Paleologo

La Espada del Rey Don Sancho:
Obra de autoria del Principe Don Sergio Jesus de San Marcelo, Vasallo y Paleologo de Plast y Montefalco.
http://www.imperialclub.net/elcid.htm
Discurría el año del señor de 1065, el gran Rey Fernando I, de Castilla,aquel cachorro hijo del Rey Sancho el Mayor de Navarra, el cual casara con Sancha de León, la deseada, por ser poseedora esta del reino más antiguo de las Españas, con raíces Visigodas, de Suevos, de Gascuña, y de la cuna franca, de aquel Rey Clodoveo que en Reims se coronara, con el casamiento Sancha y Fernando se gesto lo que hoy es España, pero negros nubarrones se cernían en su cama, el Rey Fernando moría, el reino se desmebraba, pues repartía el reino que trabajo unir costara, a Alfonso dona León, a Sancho Castilla entrega, a García dio Galicia, y Urraca y Elvira sin nada, Urracaque era la mayor sin hablar no se quedara, con tremendo desazón a su padresuplicara.A Alfonso disteis León, con Asturias y Sanabria, a Sancho Castilla la biennombrada, a García con Galicia, y Braganza la altozana, su ánima quedotranquila y la mía alterada, y a mí que soy vuestra hija me olvidáis cuan auna rata, si hasta vuestro hijo bastardo Arzobispo lo nombrarais, primadode las Españas Cardenal es del Papa, y a mi y a mi hermana nada, el Rey conmedida voz a su hija replicará, calledes hija calledes, no digáis talpalabra, que un rincón de mi León yo os reservaba, Zamora tiene por nombre,Zamora la bien cercada, de un lado la cerca el Duero, del otro Peña tajada,del otro la morería, es mi ciudad mas preciada, quién os la tomare hija, lami maldición le caiga, todos dijeron amén, menos Sancho que se calla, a supequeña Elvira el Señorío de Toro dejara, y hasta el fin de sus vidas ambaslo disfrutaran, y por ello el Rey les pidió que nunca fueran casadas.Así después de la muerte de este gran Rey, comienza la épica historiazamorana, la ambición de Sancho I le hace ponerse en marcha y al frente desus tropas se pone en camino, primero despoja a Alfonso, posteriormente sedirige a Galicia, de donde García echara, después se fue hasta Toro y aElvira si señorío la dejara, consumada en su mayor parte la villanía, hacíaZamora sus tropas se dirigen, sabía el Rey Don Sancho que le falta la tareamas difícil, expulsar a Urraca, ya Zamora se divisa su corazón se agitaba,pronto serás mía, en su interior gritaba, que iluso este rey era, la ciudadesta fortificada, con altos muros y enseñas toda ella circundada, un temblorrecorre el cuerpo del ambicioso monarca, en su interior presentía la derrotamas sonada.Que rabia le consumía ante la ciudad cercada, no veía el medio de franquearsus murallas, dándole vueltas a la idea, decide mandar a su lugarteniente yprimo Rodrigo Díaz de Vivar en Embajada, sabia este que a su hermana élamaba, así con bandera blanca y el corazón en un ascua, traspasa Rodrigo losmuros que de ella lo separaban, que hermosa que estaba la Reina en su doselsentada, a su lado sus hermanos la acompañaban, sus palabras no salían de suboca, el silencio lo mataba, con el corazón ardiente Rodrigo habla, señoramuy amada, por nuestros juegos de niños, os suplico que abandonéis laplaza, la reina con voz muy dulce, pregunta quién lo manda, vuestro hermanoSancho quiere para él vuestra la ciudad, decid a mi hermano que nunca lalograra y mi sangre si es preciso las calles ha de regar, dicho esto laReina abandona la estancia, y Cid con triste caminar se da la vuelta y semarcha.El Rey Sancho había levantado su campamento a unos dos kilómetros de Zamoraen el camino de Benavente, y desde allí el mismo dirige el cerco, el cualse prolonga por varios meses,( por algo llamaban a la ciudad de Zamora, LaSeñora bien cercada, siete muros protegían a la ciudad deseada, así pasanlos días y no conseguía nada).Los habitantes de Zamora estaban ya agotados, después de siete meses decerco, las reservas de comida se terminaban, por ello después del consejodel Reina, un gallego que aquí moraba, Bellido Dolfos el se llamaba, hijo deDolfos Bellido, abandona bruscamente el consejo, piensa como librar a laciudad del cerco, y a media noche saliendo por un por una pequeña puerta seencamina al campamento del Rey, y diciendo que trae noticias de un postigopor el cual pueden entrar, es conducido a presencia del Rey, el cual sinatender a sus consejeros decide ir a ver el dicho postigo, a la caída de lanoche emprende el camino hacía Zamora.Lo que estos no saben, es que son seguidos por los primos del Rey, RodrigoDíaz de Vivar y Diego Ordóñez, en silencio detrás de ellos caminan, con loscaballos embozados para no hacer ruido, ya en las cercanías y en el espesobosque, al Rey le entran ganas de hacer sus necesidades mayores, y noaguantando mas, ruega a Bellido que le sujete su lanza mientras el descargasu cuerpo de la necesidad, un pensamiento cruza por la mente del militar ylo lleva al efecto, se vuelve y con la lanza en posición de ataque, embisteal pardillo del Rey que ocupado en defecar no apercibe lo que se le vieneencima, siente un silbido y un dolor agudo traspasa su pecho, las fuerzasle abandonan y cae en suelo como muerto.Con su misión cumplida, Bellido emprende la huida, la ciudad esta próxima,Rodrigo y Diego Ordóñez oyen el quejido del Rey, apresurando sus pasosllegan donde desvanecido esta, vive clama Ordóñez, el Cid viendo a Bellidoescapar sale rápido en su persecución, pero espuelas no llevaba y clama conemoción, maldito sea el caballero que sin espuelas cabalga, Bellido con granrapidez entra en la ciudad por la puerta de Santa Columba, la cual una vezel ha entrado se cierra bruscamente.El Rey es llevado a su campamento, nada mas postrarlo en su tienda quedamuerto, el dolor exaspera a los primos del Rey, los soldaos claman venganza,desde la ciudad oyen los alaridos y comprenden que algo malo ha pasado, hanasesinado al Rey, al enterarse la Reina cae desvanecida en brazos de suhermano García.Al recuperarse se siente desfallecer, malo era su hermano, las leyesdesprecio y prevarico, pues el testamento de su el nunca cumplió, pero eldolor que sentía el pecho le traspasó, en los muros exteriores Ordóñez asígritaba, yo reto a los zamoranos por traidores fementidos, y con ello reto alos muertos y a los vivos, a los pequeños y grandes y a los que están porengendrar, ante tantas ofensas Arias Gonzalo y sus hijos aceptan el desafió,será en el campo de la verdad.En dicho combate murieron los dos hijos mayores del Gobernador de ZamoraArias Gonzalo, viéndolo este desde, se apresta a bajar al campo de lasjustas, a lo que la reina ya recuperada se lo quiere impedir, a lo que leresponde que tiene que limpiar el honor de su ciudad, y montando su caballosale por la puerta del mercadillo, en esto llega Rodrigo Díaz de Vivar y ledice donde vais anciano, a lo que responde a luchar por el honor de Zamora yde su Reina, a lo que el Cid le contesta, Vuestro honor y el de Zamora yaestán limpios, las lagrimas brotan a raudales de los ojos del noblegobernador y rompiendo en sollozos clama, Bendito sea el Señor mi Dios, laverdad siempre resplandece.Por fin había terminado el cerco, que duro siete meses y seis días, la Reinaen la puerta del su palacio esta, a ella se acercan sus primos Rodrigo yDiego Ordóñez, la Reina rompe a llorar, en ese preciso instante las campanasempiezan a doblar, y formándose una gran procesión, emprenden el caminohacia el campamento donde yace muerto el Rey Sancho, y llegando al lugar, laReina manda levantar una cruz, sobre un menhir céltico que allí estaba, comorecuerdo perpetuo de la muerte de su hermano y en el lugar que el lanzazo ledieran, otra cruz hay que poner y la fecha en ellos grabar, 6 de Octubre de1072.La Reina llora junto al cuerpo de su hermano, a ella acuden los recuerdos,su hermano era bueno pero la ambición le cegó, y formando un gran cortejohacia Zamora partió, las gentes van suspirando, las zanfoñas tocan ya, juntoa las gaitas sonoras mezclados sus ritmos van, y en Zamora estuvo unos díashasta que partió hacia el monasterio de Oña donde se le sepulto, y aquítermino esta historia, que en nuestra ciudad sucedió, hubo torneos y odios,pero la ley se cumplió, Urraca murió de Reina, en su ciudad se la amó. http://www.imperialclub.net/elcid.htm

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